Imágenes obtenidas del visor ambiental de la Comunidad de Madrid. Valdecarrizo y zona norte de Tres Cantos (2006-2018).

https://idem.madrid.org/visor/?v=ambiental&ZONE=441063.3283788001,4497083.904136536,14

Con la llegada del PGOU de Tres Cantos y la planificaciòn del Nuevo Tres Cantos, en la década de 2010 se han construido diversas infraestructuras en su entorno: 4 tanques de tormenta, canalizaciones de aguas fecales y agua de lluvia, ademas de varias vías asfaltadas en los márgenes próximos que la atraviesan sobre 7 puentes. Como resultado, el aporte de agua al cauce se ha visto mermado por estas actuaciones, que han alterado su dinámica hídrica, y en los últimos años es patente una disminución del caudal que transporta el arroyo. Se resalta también la existencia de varios tramos de alta tensión que transcurren cientos de metros directamente y paralelos al cauce, que se traduce en el talado permantente del bosque bajo dichas líneas.

Dibujo sobre mapa del Plan Especial del Parque Norte presentado por FCC

Se aprecia con claridad la ocupación de la zona de policia (zona legal de protección de los cauces hídricos) y estrangulamiento del bosque de ribera del arroyo por instalaciones

Se supone que las administraciones debían estar pendientes de que las obras de urbanización se realicen conforme a las condiciones incluidas en los planes urbanísticos que afectan al entorno, para reducir los impactos negativos sobre el medio ambiente y salvaguardar la biodiversidad del bosque de ribera y su entorno inmediato. Sin embargo, durante un recorrido realizado en cualquiera de los márgenes hoy día pueden apreciarse múltiples puntos del entorno del arroyo altamente degradados por diversos motivos: coladas de hormigón esparcidas, restos voluminosos de mallas de plástico y aislantes de obras, vallas metálicas rotas, acumulaciones de escombros y grandes tuberías, taludes artificiales de tierra. También es importante la infinidad de desperdicios abandonados por los vecinos como latas y botellas de refrescos, vidrios, bolsas de plástico, prendas textiles entre otros objetos. Hay que destacar también que no es transitable el paso por debajo de los puentes, de altura insuficiente.

Resulta incomprensible este abandono del ayuntamiento de su responsabilidad del cuidado sobre toda esta zona y que tenemos tan cerca de la ciudad. Muchos ayuntamientos de la Comunidad de Madrid soñarían con tener un bosque de ribera de estas características y se habrían esmerado en mantenerlos cuidados y protegidos, como ocurre con los arroyos de otras localidades cercanas como El Pardo, Colmenar Viejo, Soto de Manzanares o San Agustín de Guadalix. A pesar de todo, este entorno natural mantiene un alto valor medioambiental.

Así hemos llegado al 2021, cuando el ayuntamiento de Tres Cantos publicita un parque urbano que llamará Metropolitan Park, y que costará decenas de millones de € para construir una laguna playa artificial con piraguas, un campo de futbol, instalaciones de restauración y otras dotaciones deportivas sin precisar.

En sí mismas, estas instalaciones pueden ser beneficiosas para dar servicio a los vecinos, pero no se entiende que se construyan sobre los hábitats del entorno inmediato del arroyo o sobre el mismo cauce, alguno declarado de interés comunitario de carácter prioritario.

El ayuntamiento no puede justificar mega-proyectos que amenacen aún más la biodiversidad del bosque basándose en la degradación y abandono de los que ha sido responsable.

La consecuencia inmediada será que esta actividad constructiva en un entorno tan sensible, perjudicará gravemente la biodiversidad que habita en la zona, obligándola a abandonar el refugio que hasta ahora ofrece el bosque de ribera. Es necesario que se proteja a toda costa el carácter natural del arroyo y su entorno próximo, restaurando las zonas degradadas sin estas nuevas instalaciones, que deberían ubicarse en otras zonas donde no causen impactos tan perjudiciales para el entorno natural.

Pico menor (Dendrocopos minor) (Valdecarrizo, abril 2021)